Los turistas argentinos que quieran pasar sus vacaciones en Floripa, deben tener en cuenta que gastarán una media de 56 reales en comer cada día fuera de casa. El importe es uno de los más caros del país.
Los datos proceden de una encuesta realizada por Mosaiclab, empresa de inteligencia de mercado del grupo Ecosistema Gouvêa.
Florianópolis, uno de los lugares más caros para comer
Mientras que la media nacional es de 46,60 reales, el precio más alto del país por una comida fuera de casa está en Florianópolis, capital de Santa Catarina, donde el plato cuesta una media de 56,11 reales.
Según la encuesta, el precio del almuerzo ha subido un 14,7% en comparación con el año pasado a nivel nacional.
La encuesta tuvo lugar entre junio y agosto de 2023, en 4.516 establecimientos comerciales, 22 estados y el Distrito Federal. En total, se recogieron 5.470 precios de platos de todo Brasil, en establecimientos que sirven comidas a mediodía de lunes a viernes.

Para calcular el precio medio, la encuesta consideró cuatro categorías (a la carta, ejecutivo, autoservicio y prato feito) de una comida completa compuesta por: plato principal, bebida no alcohólica, postre y café. El Sudeste es la región con el precio medio más alto del país: 49,33 reales.
Y la comida pesa en el presupuesto mensual. Según el IBGE, el salario medio en el país era de 2.921 reales en la fecha de inicio de la encuesta. Esto significa que para comer una comida completa a la hora del almuerzo, los trabajadores necesitan gastar 1.025,20 reales al mes, lo que equivale al 35% del salario medio.
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El alquiler y la energía influyen
Una serie de factores contribuyeron al aumento de los precios en la encuesta de este año, afirma Ricardo Contrera, socio director de Mosaiclab, empresa responsable de la encuesta.
En los últimos meses se han producido subidas de precios en la gasolina y el gas de cocina, que sólo en julio aumentaron alrededor de un 5%. También se han aprobado nuevas subidas de la electricidad para este año.
El escenario económico post-pandémico también se refleja en los precios. La vuelta al trabajo presencial ha incrementado los alquileres comerciales y los costes de las empresas del sector, afirma Contrera.
«Durante la pandemia cerraron un gran número de establecimientos, que atendían básicamente vía delivery. Muchos redujeron su plantilla, pero tuvieron que asumir nuevos costes y elevadas tarifas de reparto», afirma.
Estos son los precios por capital
Florianópolis (SC) – R$ 56,11
Río de Janeiro (RJ) – R$ 53,90
São Paulo (SP) – R$ 53,12
Natal (RN) – R$ 51,86
Recife (PE) – R$ 49,13
Maceió (AL) – R$ 48,84
Vitória (ES) – R$ 48,79
Palmas (TO) – R$ 47,79
Salvador (BA) – R$ 46,43
Curitiba (PR) – R$ 43,42
Manaus (AM) – R$ 42,85
Cuiabá (MT) – R$ 42,63
João Pessoa (PB) – R$ 42,52
Brasília (DF) – R$ 41,45
São Luiz (MA) – R$ 40,50
Aracaju (SE) – R$ 39,68
Fortaleza (CE) – R$ 37,55
Porto Alegre (RS) – R$ 37,20
Belém (PA) – R$ 36,94
Goiânia (GO) – R$ 33,33
Teresina (PI) – R$ 33,22
Belo Horizonte (MG) – R$ 32,69
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